Miren Alós nos cuenta en primera persona cómo está pasando estos días de cuarentena. Un momento para reflexionar y conocerse a uno mismo; también un tiempo de cambios.
Estamos viviendo una situación histórica y, me atrevo a decir, surrealista. Si hace unos meses me hubiesen contado todo esto, no me lo hubiese creído.
Personalmente estoy intentando vivir este confinamiento de forma positiva. Creo que, de alguna manera, el sentirme en la obligación de frenar en seco y cambiar mi ritmo de vida por un tiempo ha hecho y está haciendo que lo valore todo mucho más cada día que pasa. Valoro más a mi familia y amigos, valoro el contacto físico, el poder abrazar, besar, dar la mano. Valoro la vida y mi forma de vida, la sensación de libertad, el poder dar un paseo por la playa, la naturaleza, viajar…
Estas semanas y mis prácticas de yoga están sirviéndome para hacer introspección y conocerme de una manera diferente. Ser consciente y conectar conmigo misma. Sentirme en calma y tranquila a pesar de las circunstancias gracias a la paciencia y la aceptación.
Creo que habíamos llegado a un punto en el que íbamos demasiado rápido, arrasando con todo, incluso con la naturaleza y el planeta en el que vivimos. Nos estamos dando un respiro y se lo estamos dando también a él.
Esta situación está sacando el lado más humano de todos nosotros. Como dice Alejandra G. Remon: “Nunca tenernos tan lejos había significado sentirnos tan cerca, amarnos tan fuerte o vivirnos tan lento”.
En mi caso, estoy aprovechando esta época para dedicar tiempo a cosas que me gustan y me sientan bien, adquiriendo nuevas rutinas que antes no apreciaba de la misma manera. Así pues, ¿Qué hace Miren durante un día de confinamiento?
Estoy aprovechando para cocinar algunas cosas que me apetecían desde hace tiempo como pan casero.
Por otro lado, también estoy intentando crear un contenido diferente al habitual y alimentar mi creatividad a la vez que doy ideas e inspiración a mi comunidad.
Por último, estoy leyendo mucho y me está ayudando a desconectar, distraerme, aprender y llenarme. De momento me he leído los siguientes libros:
- La conquista de la felicidad
- Juntos, nada más
- También esto pasará
- La amaba
- Los pilares de la tierra (estoy con este)
Y no puede ser más cierta la frase de Carlos Ruiz Zafón en La Sombra del Viento:
“Cada libro tiene alma. El alma de quien lo escribió y alma de quienes lo leyeron y vivieron y soñaron con él.”